Movimiento de Mujeres Palestinas Alkarama
 Movimiento de Mujeres Palestinas Alkarama

JERUSALÉN

Comunicado Urgente del MOVIMIENTO DE MUJERES PALESTINAS EN LA DIÁSPORA “ALKARAMA”: Petición del fin de las hostilidades y la ocupación de Jerusalén por las Fuerzas israelíes.

 

JERUSALEN ES DIGINIDAD, ES RESISTENCIA!!!

 

Desde el Movimiento de Mujeres Palestinas (MMP)- Al Karama, organización palestina, feminista, laica y anticolonialista cuyo objetivo principal es generar un nuevo espacio de enunciación de las mujeres palestinas en la diáspora, queremos hacer un llamamiento AL FIN DE LA OCUPACION Y LAS HOSTILIDADES POR

 

PARTE DE ISRAEL EN JERUSALEN.

 

En 1967 Israel, mediante la guerra de los 6 días invadió Jerusalen Este y la anexionó a sus fronteras. Esta anexión ha provocado un amplio rechazo en la comunidad internacional, materializado en la resolución 478 del Consejo de Seguridad de la ONU, que la consideró contraria al Derecho internacional, y en señal de protesta por este acto unilateral los Estados miembros de las Naciones Unidas acabaron por trasladar sus embajadas a Tel Aviv, tal como pedía la resolución.

 

Después de los incidentes producidos el 7 de julio de 2017 en la mezquita de Al Aqsa, en la que tres palestinos fueron abatidos por las fuerzas israelíes y les dejaron morir desangrados, tras un ataque contra las fuerzas de ocupación, Israel tomó ladecisión ilegítima de cerrar la mezquita de Al Aqsa. Este incidente y otros más que se sufre continuamente en Jerusalen ocupada, es el resultado de las continuas provocaciones del Estado de Israel, la última, la incursión de tropas especiales israelíes en la explanada de las mezquitas, portando banderas israelíes y provocaciones a los guardias de seguridad interna. Es la política que últimamente está llevando a cabo Israel para anexionarse la ciudad de Jerusalen, de manera ilegal.

 

Días después Israel decide poner detectores de metales en Al Aqsa, para permitir la entrada de palestinos a ella. Se trata de parte de la estrategia israelí para cambiar la situación histórica de Jerusalén. Los palestinos nos negamos a que la gente atraviese esas puertas para rezar.

 

Es importante destacar que la resistencia palestina no tiene ni ha tenido nunca ejército ni armada ni aviones de combate ni nada que se le parezca; es relevante recordar que la tremenda asimetría de poder bélico encierra otra de carácter político e histórico: uno es el invasor, ocupante y colonizador, y otro es el despojado, ocupado y colonizado. Aun así, para la narrativa dominante en Occidente los palestinos son siempre los violentos agresores y los que empezaron primero. Pero no es así, Palestina tiene el legítimo derecho a defenderse de la agresión de uno de los ejércitos

más poderosos del mundo, y más aún: su derecho a resistir un régimen brutal de ocupación militar y colonización que ya lleva casi siete décadas y que ha sido reiteradamente condenado por la misma comunidad internacional. Un derecho que está consagrado incluso por la Resolución 3101 de la Asamblea General de la ONU (de diciembre de 1973), que afirma el derecho legítimo de los pueblos bajo dominación colonial y extranjera, y bajo regímenes racistas, a luchar por su autodeterminación .

 

Desde 1967 la comunidad internacional entera acepta que Palestina está sometida a ocupación por parte de Israel; esto incluye también a Gaza después de la ‘retirada’ israelí de 2005, ya que -según el derecho internacional humanitario- un territorio está ocupado (aunque el poder ocupante no tenga presencia física en él) mientras mantenga control sobre él por la fuerza -como es claramente el caso de Gaza, sometida a un férreo bloqueo por aire, mar y tierra, incluyendo sus fronteras.

 

Hecha la aclaración, en Gaza (al igual que en Cisjordania y Jerusalén Este) aplican las normas internacionales que definen las obligaciones de la potencia ocupante respecto del territorio y la población ocupados. La más importante es el IV Convenio de Ginebra, según el cual –entre otras obligaciones– el poder ocupante tiene el deber

de proteger a la población ocupada y velar por su bienestar.

 

Israel sin embargo alega que no está ocupando Palestina, sino que está en guerra con ella, y por lo tanto tiene derecho a la “defensa propia” , e incluso a usar la fuerza más allá de los límites legales. Esta interpretación ha sido categóricamente rechazada por la Corte Internacional de Justicia en 2004, cuando emitió su opinión consultiva

 

“Consecuencias legales sobre la construcción de un muro en el territorio palestino ocupado”, afirmando que Israel no puede invocar el derecho a la defensa propia según el artículo 51 porque no está siendo atacado por un Estado extranjero. Israel distorsiona el derecho internacional a fin de justificar su uso ilegal y desproporcionado de la fuerza militar y ejerce su poder colonial sobre el territorio y la población que ocupa, despojándola no solo de su derecho a defenderse sino también de los medios mínimos para su subsistencia, al someterla a un bloqueo inhumano.

 

Instamos a todos los gobiernos de bien y de derecho a que exijan a Israel a su retirada total de Palestina, y al fin de la ocupación de Jerusalen, Gaza y Cisjordania.

 

La comunidad internacional , y sus representantes, no pueden permanecer impasivos ante tales atrocidades y por ello exigimos que obligue a Israel a cumplir con el derecho internacional y las resoluciones de la ONU.”

 

“Un ejército de ocupación no tiene derecho a la seguridad y no puede pretender que está defendiéndose, porque todas sus acciones son ilegales y todos sus ataques son crímenes de guerra, y porque sencillamente el pueblo que vive bajo la ocupación y la opresión tiene derecho a usar todos los medios para resistir y liberarse."Tenemos que asegurar a la gente de todo el mundo que los israelíes no tienen ninguna soberanía legítima en Jerusalén, ni en los lugares sagrados para cristianos y musulmanes”.

 

PALESTINA NO SE RINDE

VIVA PALESTINA LIBRE!!!